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A las puertas de un nuevo Viernes Santo

Imagen del paso de misterio, detalle del estreno del frontal en pan de oro, de los talleres de dorado Abel Velarde

VIERNES SANTO, 2023

“ Me amó y se entregó por mi”. ( Gál 2,20)

Mañana es Viernes Santo. La Iglesia nos invita a contemplar, como cada año, el misterio de amor de un Dios que se ha entregado  a la muerte por ti y por mi.  Es buena la contemplación que vuelve a traernos al corazón dicho misterio. Pero es imprescindible que asumamos la tarea que el Señor pone en nuestras manos. ¿Comprendéis lo que he hecho con vosotros, le dice a sus discípulos en la cena de despedida?. Pues, si yo os he lavado los pies, gesto visible de entrega y de servicio, vosotros debéis hacer lo mismo…En la cruz de Jesús están clavados todos los sufrimientos de la historia. Él sabe lo que es  compartir la suerte de los pobres, porque siendo Dios se hizo hombre, siendo rico pasó por uno de tantos, en todo semejante a nosotros excepto en el pecado. Pero en la cruz también está clavada la muerte al egoísmo y a las injusticias del mundo. Este Viernes el Señor vuelve a proponernos clavar en la cruz todo aquello que nos hace injustos y pecadores. Todo lo que nos aleja de los demás y nos lleva a tenerlos como enemigos.” Cuando Dios desaparece del horizonte de la sociedad,  la humanidad camina hacia su destrucción” ( Benedicto XVI). Se repite por desgracia la historia de Caín.

Nuestra Cofradía participa  en el relato de esta Historia de Amor. Dios amando a sus hijos en su Hijo Jesús, a quien nosotros sacamos a la calle en la bella escena de Getsemaní.

Me preocupa que no profundicemos en este Misterio y nos quedemos en la superficie de lo que creemos y celebramos. No creemos en una imagen, sino en lo que ésta representa. No creemos en la manera de portar una imagen, sino en cómo sacamos a la calle el mandamiento del amor. Esta es la mejor manera de sacar a Jesús a la calle, hecho vida en nuestras  vidas comprometidas siempre con el bien y el respeto absoluto a los demás. Me preocupa, en el peor de los casos, que podamos caer en la tentación de ser una hermandad religiosa, pero no cristiana. Es decir un grupo religioso sin Jesús en el centro de su vida. De nuestra vida. Salgamos mañana a la calle con este compromiso que el Señor pone en nuestras manos. Creyendo en él, solidarios y cercanos de todo aquel que nos pueda necesitar. Pues, dice el Señor , cada vez que hacéis el bien o el mal a vuestro prójimo es a mi a quien lo hacéis.

Francisco Guerrero, consiliario de la Hermandad .